5 claves para una implantación BIM de éxito
Desde que en diciembre de 2018 se creara la Comisión Interministerial para la incorporación de la metodología BIM en la contratación pública, cada vez con más los interesados en dar el salto y comenzar a trabajar en BIM. Cuando hablamos de implantación BIM en una empresa, nos referimos al proceso de transformación mediante el cual un equipo de personas cambia sus metodologías de trabajo por la metodología BIM. En este artículo, vamos a revelar los secretos de una implantación BIM exitosa.
Lo primero que nos planteamos antes de dar el salto a BIM es si será un proceso de cambio efectivo o, por el contrario, el esfuerzo quedará en un estéril intento de cambiar las metodologías tradicionales de gestión y desarrollo de nuestros proyectos y obras por las nuevas. Estos pensamientos no están en absoluto alejados de la realidad. Y es que un elevado porcentaje de proyectos de implantación BIM están fracasando.
Si lo desea, en MV-BIM podemos encargarnos de su implantación asegurándole un buen resultado. Contacte ahora con nosotros para más información.
Bajo nuestro punto de vista, las claves para asegurar el éxito dentro de un proceso de implantación BIM son las siguientes:
1. Disponer de un plan director.
Disponer de un plan director es, para nosotros, el punto más importante de todos. En MV-BIM lo llamamos «Plan estratégico de implantación BIM«. Es un plan a medida que define todas las fases y acciones necesarias para llevar a cabo la implantación BIM en una empresa.
Es importante resaltar que, igual que no hay dos empresas iguales, no hay dos planes directores iguales. El plan director es el resultado de un proceso de auditoría, que tiene como objetivo entender qué tipo de trabajos realiza la empresa y desde qué punto parte. Entre otros, el plan director determina las acciones necesarias para:
- Actualizar hardware y software.
- Formación de recursos humanos.
- Plantillas y contenido BIM necesarias.
- Compartimentación de información.
- Organigramas y responsabilidades.
- Manuales BIM necesarios.
- Estándares y protocolos necesarios.
- Definir un proyecto piloto.
El plan es fundamental para comprender el alcance de la implantación BIM. Así como para fijar objetivos y plazos de la misma. De esta forma, se pueden acometer las distintas acciones de forma independiente, pero estando incluidas dentro de un mismo plan director.
Son muchos los ejemplos de empresas que comienzan a realizar acciones e inversiones aisladas sin ningún plan director, y han caído en saco roto. Por ejemplo, dar cursos de Revit o cualquier software de modelado, sin que exista un plan en el que se encuadre.
2. Designar un líder interno.
El objetivo final de una empresa cuando se embarca en un proyecto de implantación BIM es alcanzar autonomía, y hacerlo de forma eficiente. Nosotros como empresa consultora BIM, necesitamos encontrar un líder BIM dentro de la organización en la que estamos trabajando. Alguien que en el futuro adquiera el rol de BIM Manager. De esta forma, el perfil de la persona debe recoger, al menos, los siguientes atributos:
- Estar convencido de los beneficios de BIM, sin fisuras.
- Facilidad para trabajar en entornos digitales.
- Ser jugador de equipo y altamente generoso a la hora de compartir conocimientos.
- Buen comunicador.
- Tener conocimiento de la empresa y tener planes de futuro en la organización.
Es importante resaltar que, por medio de la creación de manuales y protocolos internos BIM, intentaremos que el proceso de implantación BIM no dependa de ninguna persona. No obstante, siempre es necesario que alguien tome las riendas y se convierta en referencia durante el proceso de implantación y al final del mismo.
3. Poder medir y comparar resultados.
En MV-BIM tenemos muy claro que, para poder afirmar que hemos completado con éxito una implantación BIM en una empresa, tenemos que demostrar que la inversión ha sido rentable. Tenemos que demostrar que, gracias a la metodología BIM, nuestro cliente es capaz de hacer mejores proyectos, en menos tiempo y por menos coste que antes. De esta forma se alcanza el retorno de la inversión esperado.
Para poder justificar que esto se produce, es necesario medir los parámetros de coste y tiempo en desarrollar proyectos existentes antes del cambio a BIM. Así, una vez concluido el proceso, se podrán comparar resultados.
4. Entender el coste real de la implantación.
Basados en nuestra experiencia en implantaciones BIM, llegamos a la conclusión de que es crítico que nuestro cliente entienda la inversión que supone embarcarse en una implantación BIM. No solo económica, también hay que tener en cuenta el tiempo de dedicación de los miembros del equipo objeto de la implantación.
Es muy común que los dirigentes de la empresa, cuando se plantean un proceso de implantación BIM, no cuenten con el impacto que ocasiona en sus ritmos de producción el volumen de horas que los técnicos de su plantilla van a dedicar, por ejemplo, a la formación o al proyecto piloto. En un proceso de implantación común, en una empresa de arquitectura o ingeniería, podemos estar hablando, para un técnico, de unas 350 o 400 horas de formación. Normalmente se organizan en 8-12 horas semanales, lo que supone 20% y un 30% de su dedicación.
Es importante advertir que, para que se mantenga el mismo ritmo de producción sin cargar a los empleados con horas extra, se debe contar con ampliar la plantilla durante el tiempo que dure la implantación BIM.
5. Contar con la ayuda de una empresa externa.
Disponer de la ayuda de consultores BIM es importante para asegurar que la implantación se realiza de forma segura, basada en las mejores prácticas contrastadas y eliminando el riesgo de dar pasos en falso. Esto, a la larga, además de suponer un mayor coste, puede ser motivo de una frustración que acabe con la ilusión de mejorar la calidad y rentabilidad de nuestros proyectos a través de la adopción de las metodologías BIM.
En MV-BIM somos un equipo de expertos con más de 10 años de experiencia en procesos de implantación BIM en empresas de arquitectura, ingeniería, empresas constructoras y promotoras, habiendo formado a más de 1.000 profesionales en los últimos 5 años.
Implantación BIM con MV-BIM
En MV-BIM las implantaciones las planteamos en tres fases:
- Auditoría BIM. En la primera fase de auditoría se analizan el estado actual de la empresa en los campos de recursos humanos, infraestructura IT (Hardware y software), procesos internos y estándares y protocolos. Esta fase inicial de auditoría concluye con un plan estratégico de implantación BIM. La planificación y la definición de la estrategia es la parte más importante para el éxito de un proyecto BIM. Para esto MV-BIM analiza en una primera fase los objetivos, las disciplinas implicadas y las características del cliente para obtener el máximo beneficio del uso de las herramientas tecnológicas que componen la metodología de trabajo BIM.
- Puesta a punto BIM. En una segunda fase, se ejecutan las acciones definidas en el plan estratégico de implantación BIM, que principalmente son: formación BIM a medida, manuales BIM, plantillas BIM y bibliotecas BIM.
- Proyecto Piloto. Ya por último en la tercera fase, hacemos de consultoría BIM integrándonos con el equipo técnico de nuestro cliente durante su primer proyecto, dando un servicio de asesoramiento BIM y formación BIM a medida focalizado en proyecto.
Nuestro objetivo es que el salto de CAD a BIM se produzca de la forma más fluida posible gracias a un seguimiento y actualización continuos. Todo ello, con la garantía de contar con un amplio grupo de profesionales del sector como apoyo.
José Mora
Founder & CEO (MV-BIM)